La voz de los otros :PIQUINU

Sucede que alguna gente se queda sin voz, sin espacios donde gritar y mostrar a los cuatro vientos su realidad cotidiana. Sucede que nuestra realidad lingüística queda confinada a las casas, a la familia pero desde afuera no recibe ningún tipo de respaldo. Sucede que sin dicho respaldo  no se puede sobrevivir ni fomentar nuestra cultura ni  pluralidad lingüística. Sucede que para recuperar la riqueza del bable / asturiano y sus múltiples variantes se necesita urgentemente  una serie de actuaciones que supongan su protección total. Sucede que se está dejando morir conscientemente a  nuestra cultura y nuestras raíces.

Como homenaje a mi tierra y sus gentes me gustaría mostrarles el corto PIQUINU de la profesora y artista plástica Sonia Fernández que tiene como protagonista a Aarón. Un joven de 13 años que nos cuenta cómo es su entorno y su conexión con el monte y la montaña. Algo esencial en su joven vida. Parece ser que la idea surgió tras un concurso de relatos cortos en el instituto en el que Aarón escribía sobre su pueblo y el xabalí del picu la Penasca. Ante esto, la profesora decidió que allí había una posible historia que enseñar. El corto es una manera de mostar el mundo rural, de llevarnos a un viaje por parte de la montaña central asturiana pasando por Riospaso, el Cordal y las Ubiñas. Es una manera de ver que lo que se cree en extinción y minoritario está más vivo, presente y generalizado de lo que se cree, a pesar de que muchos quieran contribuir a su ostracismo.

El corto es muy íntimo. Una gran oportunidad para disfrutar del paisaje y  de una forma de vida muy auténtica. Como dije en otro post (http://justideas-be.blogspot.com.es/2012/08/mi-paraiso-particular-asturias.html) los asturianos van y viven con los ojos llenos de paisaje y una vez más me reafirmo en lo dicho con este pequño corto. Ante tanta immensidad a tu alrededor uno se siente como dice Aarón "piquinu" (pequeño).

       
PIQUINU from SONIA FERNÁNDEZ on Vimeo.

La historia alternativa en LA CONJURA CONTRA AMERICA

Desconcierto tras leer La conjura contra América de Philip Roth y es que el planteamiento del autor norteamericano de dibujar una historia totalmente plausible utilizando como punta de partida la simpatía del héroe norteamericano Charles Lindberg(primer aviador que cruzó solo el Atlántico y muy popular para los estadounidenses) por la causa nazi y su papel como presidente de EEUU te hace dudar en muchas ocasiones si lo que el escritor nos  cuenta es real o es solo producto de su imaginación. 
De hecho, una vez concluida la novela, tuve que ir a releer ciertos aspectos de la reciente historia norteamericana porque la historia está tan bien construida que acabas perdiéndote en los abismos de la ficción....
Poneos en situación: Qué hubiera pasado si....un simpatizante de Hitler y el nazismo gana las elecciones presidenciales como candidato republicano en los Estados Unidos del 1940 y pone en práctica políticas de segregación y vejatorias contra la población judia norteamericana y hace pactos con el mismísimo Hitler? Dicho asi, puede sonar a una super americanada pero Philip Roth lo narra con absoluta perfección haciendo que lo que nos cuenta suene totalmente verosímil.
Esta es una historia complicada, con más de 400 páginas que en ocasiones se puede hacer pesada pero en su conjunto es una novela interesante teniendo en cuenta que resulta bastante difícil exponer y hacer referencia a unos episodios tan recientes que forman parte de nuestra identidad y de la historia contemporánea. Incluso yo diría que es una novela arriesgada en la que se describe con todo detalle el crecimiento abrumador de un estado fascista que abandona a su suerte a sus minorías además de tener una política no intervencionista en lo que a la 2ª guerra mundial se refiere.
La novela pierde un poco este carácter más serio o político, que a priori parece tener, porque Roth nos cuenta la historia siempre desde la perspectiva de un niño pequeño de 7 años que nos habla de su familia y de la vida cotidiana de los habitantes de un pequeño pueblo llamado Newark. El niño se llama como el autor y el pueblo no es ficticio si no que es  pueblo natal del escritor, por lo que podría haber algún que otro detalle autobiográfico en pinceladas muy dispersas a lo largo del libro. El hecho de tener este narrador hace que lo que se nos cuenta sea más creíble porque el pequeño Philip muestra toda su ingenuidad e incomprensión ante los hechos que van aconteciendo a su alrededor.
Es interesante como la tensión crece paulatinamente alcanzando su clímax en las últimas 40 pags. aproximadamente. Esta tensión se palpa en las relaciones familiares, de amistad y vecinales. Las sensaciones de pánico, incertidumbre, desazón, desilusión, desorientación están muy bien narradas y la integración de personajes reales y de  ficción está muy lograda.